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10 cualidades de un buen gestor deportivo
“Rodéate siempre de gente mejor que tú porque probablemente algún día llegues a ser como ellos”. En mi opinión y como he manifestado en muchas ocasiones, trabajar en equipo y rodearte de gente formada y experta es la mejor manera y la más sencilla para poder conseguir todos los objetivos que nos marquemos.
Un buen gestor deportivo no sólo debe contar con la mejor formación, para que podamos conseguir todos los retos que nos propongamos y alcanzar grandes metas es imprescindible contar con unas cualidades que van mucho más allá de la experiencia y la formación.
Estas son algunas de las cualidades que debería tener todo gestor deportivo:
1.- Liderazgo: Carisma. Un buen gestor tiene la capacidad de liderar a su equipo a través de la motivación. Ejerce el papel de líder y no el de jefe, es capaz de mantener una gran motivación de los componentes de su equipo gracias a su capacidad de ganarse la confianza y la simpatía de sus colaboradores y no mediante el “ordeno y mando”
2.- Comunicación: Buen comunicador. Tiene facilidad para transmitir ideas a su equipo de un modo claro y sencillo, de este modo es capaz de ganarse la confianza de sus colaboradores. La comunicación no es sólo la capacidad de transmitir mensajes entendibles, la comunicación también implica saber escuchar.
3.- Empatía: Definimos la empatía cómo la capacidad para ponerse en el lugar del otro. Un buen gestor debe tratar a sus colaboradores como iguales. A través de la empatía es posible captar las necesidades e intereses de nuestro equipo, esto significa tomar en cuenta los sentimientos y emociones de los miembros que lo componen. La empatía lleva a comprender a los demás porque somos capaces de percibir sus perspectivas e ideales pero también a tomar en cuenta sus preocupaciones.
4.- Formador: El líder de un grupo debe preocuparse por transmitir y compartir sus conocimientos con sus colaboradores, de esta manera vamos a fomentar el desarrollo de las personas y a fortalecer su confianza es nuestro liderazgo. Pero el papel de formador no sólo debe limitarse a compartir conocimientos, un buen líder es capaz de aprender de los componentes de su equipo y con ello enriquecer sus conocimientos.
5.- Crecimiento: El gestor debe ser capaz de aprender de su propia experiencia y evolucionar con cada problema que se le presenta, de esta manera su capacidad resolutiva ante los nuevos problemas será mucho mayor y estos serán resueltos con solvencia.
6.- Trabajo en equipo: Un líder que trabaja en equipo no solo dirige, colabora. Él es parte del equipo y sabe delegar tareas y responsabilidades, de esta manera consigue reforzar la confianza que los colaboradores tienen en su figura y conseguirá ganarse el respeto de los mismos.
7.- Negociador: El buen gestor deportivo debe tener gran capacidad para llegar a los acuerdos más satisfactorios para todas las partes implicadas, no sólo con su equipo sino en las decisiones que le permitan llegar a alcanzar los objetivos previamente establecidos y llegar a las metas que la organización se ha propuesto. El buen negociador consigue solucionar los problemas que puedan surgir con un grado muy alto de éxito.
8.- Creativo: Un líder creativo es una mente innovadora. Genera nuevas ideas. Busca nuevas oportunidades. Perciben con todos sus sentidos, desarrollando al máximo la intuición para realizar nuevos descubrimientos y nuevas formas de llevar a cabo las tareas. Un gestor que tengan capacidad creativa es capaz de buscar nuevas alternativas y redefinir los problemas o situaciones, buscan nuevas soluciones alternativas, además de poder redefinir las situaciones en varias versiones y por este medio poder darles una solución.
9.- Flexibilidad: Tiene facilidad para adaptarse al cambio. Aprovecha las oportunidades que se le plantean y es capaz de prever las amenazas que puedan presentarse. El gestor flexible tiene la habilidad para poder ver las situaciones y problemas desde diferentes perspectivas o desde diferentes puntos de vista para poder llegar a la mejor forma de salir de ellas.
10.- Ética: Todo gestor deportivo que se precie y que quiera gestionar una organización debe ser una persona íntegra, coherente con sus principios. Cuando un líder es consecuente en su comportamiento, con sus ideales y valores, muestra una conducta marcada por la integridad y consecuentemente consigue ganar credibilidad ante las personas. Ganarse la confianza de sus colaboradores tiene que ver también con la capacidad de mantener y cumplir con sus compromisos.